En Mayo de 2.004, el Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya por medio de su máxima representante, la consellera Sra. Marina Geli, presentó su intención de regular las terapias naturales en Catalunya. Esta regulación incluía tanto a profesionales que la ejercen como a los centros de tratamiento, los centros formativos y a sus profesores.
A partir de ese momento, la Generalitat delegó en el Institut d’Estudis de la Salut la elaboración de las guias formativas, las evaluaciones, etc… con el fín de acabar proclamando, el pasado mes de marzo el proyecto de Decreto por el cual se regularían el ejercicio y la profesión de lo que la Generalitat ha decidido llamar “Práctics en Salut”. Hasta aqui todo parece correcto, pero la forma en como se ha llevado a cabo el proceso, cómo se han elaborado las guías formativas, su contenido tanto en materia mayoritariamente innecesaria como en exagerado número en horas lectivas, la elaboración de unas pruebas de exámen y, por fín, un decreto alejado de la realidad del sector, han puesto en pie de guerra a los colegios sanitarios (médicos, farmaceuticos, fisioterapeutas, enfermería), cosa que ya entra dentro de lo previsible, pero también a un amplio, yo diría que mayoritario, sector de los terapéutas en ejercicio y a las escuelas formativas. Y digo mayoritario porque cualquier porfesional o escuela que conozca como se ha ido llevando a cabo el proceso y haya leido el decreto, mostrará su disconformidad a no ser que se esconda algún interés económico – político – personal. Y a los hechos me remito.
La actuación del Institut d’Estudis de la Salut ha dejado mucho que desear. Desconocedor de la realidad del sector, confío desde un incio la desición de como debían ser y que duracion debían tener las guías formativas a personas que han demostrado tener intereses personales, cosa que todos sabíamos y que avisamos en reiteradas ocasiones al IES, obteniendo solo buenas palabras y ni un hecho. Cuando las guías fueron publicadas, abriéndose un plazo de dos meses para modificaciones, alegaciones y propuestas, una escuela ya las ofrecia en programas impresos como definitivas, con las horas lectivas, que el IES ya había retirado, y con precios. Y en su stand de la Fira de l’Ensenyament explicaban los pormenores de la formación transmitiendo que todo ello era definitivo y haciendo referencia a un decreto que todavía es un proyecto. A tal efecto en una feria del sector en Madrid a principios de marzo, con el beneplácito de la organización y del representante de la Generalitat, una asociaciòn afín a la citada escuela afirmaba a los asistentes a su congreso que el decreto era firme y definitivo. Ese decreto fue presentado dos semanas más tarde por la consellera Sra. Marina Geli claramente como un proyecto abierto a modificaciones y alegaciones hasta finales de mayo. ¿Es suficientemente claro que el proceso está intoxicado y viciado?. La escuela es Ismet y la asociación, Cofenat. Y lo digo tan claro porque hay pruebas y testigos y los profesionales y los estudiantes piden transparencia.
Además de todo esto, hablemos también del proyecto de decreto que pretenden regularnos. Todos tenemos claro que la regularización es necesaria. Todos la queremos. Pero lo que no es admisible es que salgamos perjudicados de esa regulación. Y esto es lo que pasará si este decreto sigue adelante. Me explico.
En primer lugar, no reconoce la profesiòn, existente para Hacienda desde hace muchos años. Y no lo reconocen porque obligan a examinarse a todos los profesionales que ya trabajan, lo cual implica no reocnocer su trabajo de años. Además es de todos conocido el hecho de que el profesional de las terapias naturales utiliza distintas ténicas a la vez lo que puede llevar a que al ser divididas por el proyecto en cuatro cajones, homeopaía, acupuntura y MTC, terpias manuales y criterio naturista, tenga que examinarse de varias opciones y a tener que estudiar los alumnos varias temáticas, con lo que se puede llegar a necesitar más de 8.000 horas de formación. Toda una vida dedicada al estudio y una bicoca para los centros que fomentan esta opción. Ridiculo, pero peligroso. Por si fuera poco, el examen deberá de revalidarse cada 10 años, con lo cual, en caso de no superarlo, deberás buscarte otro trabajo. Es inadmisible que un decreto cree está situación de inestabilidad laboral.
Se necesitará Bachillerato formación Profesional de Grado Medio para poder acceder a los estudios, peroe stos estudios seguirán siendo no reglados. Considero que no se puede exigir una cualificación académica para acceder a unos estudios no reglados. El acceso, en base a lo que se obtiene, debe ser libre.
El decreto también crea un estado de confusión y posiblemente inconstitucionalidad al basar la acreditación en la evaluación, por el hecho de que no podrá trabajar en Catalunya ningún profesional que no haya pasado el examen y por tanto, acreditado. ¿Y si alternamos nuestra profesion en distintos lugares?. ¿Que sucede cuando un ciudadano de otra comunidad autónoma, o europea, viene a trabajar aquí, impartir un curso, etc.?. Mal si para hacerlo tiene que pasar un exámen, que el fondo significa pagar tasas, pues esto vulnera la libre circulación laboral. Pero mal si no tiene que hacerlo, pues esto discrimina a los profesionales catalanes.
Por último, hace poco aparecían en la Vanguardia unas declaraciones de una de las personas profesionales (la Generalitat nos llama expertos, pero entre los expertos hay personas que no son profesionales de las terapias naturales?¿) que están colaborando en los planes del IES. Decía textualemente, sobre las pruebas de evaluación que son “sin intención de suspender a nadie”, dando claramente a entender, según el mismo articulo, que no tendrán el listón muy alto.
Entonces me pregunto ¿para qué hacerlas? ¿no basta una declaración de trabajo, una demostración de antigüedad y un seguimiento? ¿El profesional que lleva años trabajando legalmente no está ya evaluado por sus clientes? ¿O se trata de cobrar derechos de examen, imponer sanciones, hacer cursos de dos años de reciclaje a precios importantes? Los profesionales a los que representamos y los estudiantes de nuestras escuelas merecen más respeto.
Queremos una ley, no un decreto inestable, que nos regule, reconozca y ampare. Y para ello, el Departament de Salut debe repalntearse todo lo anterior muy seriamente, reconducir el proceso alejando de él a quien sólo busca el beneficio propio. Con estas dos premisas, seguro que será fácil ponerse de acuerdo todas las partes implicadas.
Jaume Queral Marco.
Naturópata
Director de la Escuela Int. Flores de Bach
Presidente de FENACO Catalunya