Este año se ha cumplido el 85º aniversario de la obtención de la Titulación de Doctor en Naturopatía por José Castro, primer Naturopata titulado español, que la obtuvo en la American School of Naturopathy de Nueva York en 1922, el mismo año que también la obtuvo uno de los grandes sistematizadores de la Naturopatía, Herbert Shelton.

Por lo que, desde FENACO, le decimos a Sanidad que así no se hacen las cosas. Y menos en unos tiempos en los que tanto se habla de escuchar la voz de los ciudadanos, de la necesidad del dialogo y del talante. Así que nos da la impresión de que el modelo del buen gobernante, en el que prevalece ante todo el consenso y la negociación, no ha llegado aún al Ministerio de Sanidad. Y somos conscientes de que esta forma de hacer política se puede modificar, de que todavía hay tiempo para cambiar el rumbo de esta forma de hacer política que tanto daño nos origina a todos los profesionales de la Naturopatía.

El reconocimiento de la labor de los profesionales Naturópatas, que venimos reclamando a Sanidad, abre nuevas oportunidades para seguir avanzando en la construcción de la profesión de Naturopatía, ampliando y desarrollando nuevos ámbitos profesionales, mejorando cuantitativa y cualitativamente nuestros servicios de Métodos Naturales y Procedimientos de Salud que ofrecemos a la sociedad.

La regulación profesional no puede realizarse a espalda de los profesionales, quienes al fin y al cabo somos los que mejor conocemos nuestra realidad profesional socioeconomica; por lo que nadie entendería que se hiciera una regulación profesional y académica de la Naturopatía sin la colaboración activa de la profesión naturopática, y menos aún que se hiciera sin contar con nuestras propuestas, lo que acentuaría más todavía el desconocimiento del Ministerio de Sanidad sobre la profesión de Naturopatía y sus instituciones representativas. Además de considerar esto una afrenta a toda la profesión de Naturopatía. Hoya más que nunca, después de 85 años de existencia, la Naturopatía actúa con una sola voz en defensa de su identidad profesional al máximo nivel y sin complejos. Estamos dispuestos a ir al consenso siempre que haya dialogo; también al conflicto, si nos cierran cualquier vía de negociación posible.

Sería demasiado ingenuo dudar de la fortaleza de esta profesión en defensa de una reivindicación histórica. Es cuestión de repasar la historia para conocer como se ha forjado la profesión de Naturopatía. Es de esas profesiones que se han hecho a si mismas buscando su espacio e identidad profesional con sudor y lagrimas. No queremos que la Administración juegue con la sensibilidad de los profesionales Naturópatas y con el futuro que queremos para nuestra profesión. No queremos desarrollar nuestra profesión en un segundo plano. Solo pedimos una regulación como las demás profesiones que nos permita desarrollarnos profesionalmente.