Sólo la naturaleza cura es la filosofía de la naturopatía, un método natural de salud holístico que lleva a nuestro alrededor desde los tiempos antiguos. Hipócrates, más que padre de la medicina debería ser llamado más específicamente el padre de la medicina naturopática puesto que, como nosotros los modernos naturópatas, incorporaba la dieta, el ayuno, la hidroterapia, la geoterapia, la helioterapia, el ejercicio y los métodos manuales, entre otros, en su sistema de cuidado de la salud. La naturopatía no confía en un solo tratamiento, sino que es multidisciplinaria y abarca muchos ingredientes y estímulos naturales.
Comer sano, agua y aire puro, ejercicio y relajación, lo que cualquier profesional de la salud o persona instruida reconocerá como ingredientes esenciales para un estilo de vida sano, son también los cimientos sobre los que se ha construido la medicina naturopática.
La naturopatía como disciplina científica no hizo su impacto hasta el siglo XIX, cuando medicinas y cirugía se estaban estableciendo como las herramientas aceptadas para el mantenimiento de la salud. Mientras la medicina oficial se esforzaba en demostrar cómo las alteraciones de la salud se estaban volviendo cada vez más complejas, los naturópatas, por nuestra parte, emergíamos para probar su simplicidad. El secreto de una buena salud, afirmamos, reside en usar los poderes curativos de la naturaleza, no la medicación con fármacos.
La naturopatía, sin embargo, sigue siendo un método de salud marginal, abrumada por el poder político de los profesionales de la medicina oficial, hasta hace unos pocos años. En los años 70 y 80 se comenzó a ver un cambio en las actitudes sobre la salud de determinados profesionales hacia lo natural y holístico, y el mensaje de los primeros naturópatas del siglo XX como el Dr. Henry Sindlahr, Stanley Lief y Alfred Vogel empezaron a recibir un amplio reconocimiento. Ellos sostenían y nosotros confirmamos, que vivir en armonía con la naturaleza es la única forma de conseguir una buena salud duradera.
Desde entonces la naturopatía ha crecido en popularidad, a medida que la investigación confirma que sus Métodos son los ideales requeridos para una buena salud.
La naturopatía por tanto, es un Método natural de salud que utiliza los recursos y estímulos naturales para ayudar al cuerpo a curarse a sí mismo. La Naturopatía se funda en tres principios básicos: La estructura corporal, la bioquìmica y las emociones
– La fuerza vital: El cuerpo puede luchar contra las alteraciones de la salud y recuperarse debido a que posee una “fuerza vital curativa” que permite a los sistemas corporales volver a un estado de armonía conocido como homeostasis. Este estado tiende hacia la salud perfecta, y el objetivo de nosotros los naturópatas desde nuestra consulta es ayudarle con nuestros recursos y conocimiento a restablecerlo y preservarlo. En naturopatía, la salud no es simplemente la ausencia de la alteración de la salud, sino un estado en el cual cada persona se siente física, mental y emocionalmente bien.
– Los naturópatas vemos la alteración de la salud como un fenómeno natural: Las alteraciones de la salud se producen en plantas, animales y personas cuando cualquier parte de su organismo no funciona bien. Una mala dieta, una pobre eliminación de los desechos corporales, lesiones, factores hereditarios, emociones destructivas, medicamentos represivos o falta de ejercicio y la contaminación medioambiental pueden afectar el funcionamiento sano de las células de tal modo que el cuerpo se desequilibre. El objetivo de nosotros como naturópatas es identificar la causa de la alteración de la salud , ayudar a la fuerza vital a eliminarla, y restablecer el cuerpo a un estado de equilibrio.
– Los síntomas de la alteración de la salud: A menudo se producen evidencias del proceso de curación en acción. Son los síntomas de que la fuerza vital está luchando por equilibrar el cuerpo, y no deberían ser reprimidos en los individuos sanos. Sufrir una dolencia aguda (a corto plazo) como el sarampión o la gripe debe ser visto como algo normal en un cuerpo sano.
Los naturópatas vemos también las alteraciones de la salud infantiles como las paperas y la varicela como pasos necesarios para el desarrollo de un fuerte sistema inmunológico cuando sea adulto. En consecuencia, el objetivo no es vacunar contra ellas, sino asegurarse de que la dieta del niño fortalecerá su sistema inmunológico y, cuando sucumba a la alteración de la salud, alimentarlo usando tratamientos naturales. Este proceso es visto como una forma de asegurarse de que hay menos complicaciones y mayores posibilidades de tener un hijo más fuerte y sano. De un modo parecido, el esporádico resfriado o gripe y el ocasional acceso de diarrea a cualquier edad es visto como una forma sana para el cuerpo de eliminar toxinas. Por ejemplo, los naturópatas sabemos por experiencia que los resfriados y la gripe a los que se permite salir por sí mismos del sistema reducen el riesgo de bronquitis o alteraciones degenerativas como la artritis en momentos posteriores de la vida.
– El tratamiento naturopático debe ser holístico y natural: Esto se prescribe para activar y fortalecer las habilidades curativas innatas del cuerpo y para equilibrar el órgano o parte del cuerpo enfermo con el resto del cuerpo. Los componentes del tratamiento se basan en sustancias que se producen de forma natural como el agua, los alimentos integrales, la luz del sol, la relajación, el aire libre y el ejercicio, y hacemos hincapié no sólo en el tratamiento natural, sino en mantener un estilo de vida natural.
El enfoque de la naturopatía a la persona como un todo significa que sus especialistas están menos preocupados en dar nombre a las enfermedades que en comprender la naturaleza de salud y enfermedad y conseguir y mantener un cuerpo en buena salud.
– Los naturópatas creemos en el trío de la salud: Esto, en términos sencillos, significa que la buena salud depende de mantener un equilibrio entre estas tres cosas:
– La salud de la estructura del cuerpo, la buena postura, los huesos, músculos, tendones y ligamentos son vitales para el cuerpo como un todo, puesto que cualquier problema estructural puede tener un efecto dañino en el sistema nervioso y los órganos internos.
– La salud bioquímica se refiere a los efectos de la comida y la bebida sobre el cuerpo. Una buena nutrición es esencial para el crecimiento y la reparación y la inmunidad a las alteraciones de la salud. Una mala nutrición no sólo no consigue proporcionar al sistema autocurador el apoyo que necesita, sino que puede ser físicamente dañino debido a su contenido químico y tóxico.
– Las emociones poseen una fuerte influencia sobre la salud de una persona, afectando la estabilidad mental y el bienestar físico. Sentimientos como miedo, odio o resentimiento pueden alterar la digestión, el equilibrio hormonal, el flujo sanguíneo y la bioquímica del cuerpo.
Como muchos otros profesionales de métodos naturales, en especial los homeópatas, los naturópatas también creemos en la ley de la curación. Ésta afirma que en el proceso de curación todas las alteraciones de la salud se mueven de dentro a fuera, de arriba abajo, y los síntomas desaparecen en orden inverso a su aparición. En términos sencillos, esto significa que las alteraciones de la salud crónicas pueden parecer empeorar antes que mejorar puesto que sus síntomas salen a la superficie, y en la alteración de la salud respiratoria como el asma, que puede haber empezado con un eczema, la erupción es a menudo lo último en desaparecer.
La naturopatía es una filosofía de la vida antes que un conjunto de principios inflexibles. Los naturópatas tenemos como objetivo prevenir y tratar la alteración de la salud mediante un detallado diagnóstico y una amplia gama de tratamientos, muchos de los cuales tienen que integrarse en el estilo de vida de una persona para una salud duradera.
Se debe tener en cuenta que la naturopatía a igual que otros métodos naturales debe aplicarse convenientemente recomendada por un profesional, y nunca utilizarla sin conocer sus contraindicaciones.
Fuente: Educacionsalud