La formación del profesional Naturópata desarrolla valores que tienen relación directa con el respeto por los derechos humanos, a la dignidad humana, a la vida, las creencias, las ideas, los valores y el medio ambiente, cualidades que se integran al código de conducta personal como resultado de la intencionalidad académica planeada.
La Naturopatía como profesión de marcado carácter humanístico también se ejerce en una serie de valores fundamentados, que se han fortalecido desde la ética universal, desde su propia historia, pero más recientemente por la contribución específica de sus teorías y método científico de la Naturopatía profesional, que han evidenciado la necesidad de vivenciar valores éticos, estéticos y sociales, que como virtudes humanas puedan ejercerse en la práctica profesional Naturopática.
Tales como: afecto, amabilidad, autoestima, colaboración, compromiso, creatividad, dinamismo, disciplina, discreción, disposición, ecuanimidad, honestidad, iniciativa, justicia, lealtad, observación, paciencia, percepción, pulcritud, reflexión, responsabilidad, servicio, solidaridad y veracidad; las cuales se constituyen en atributos de una formación profesional Naturopática sólida, más que en requisitos de ingreso a la vida laboral.
El sentido profesional en la Naturopatía indica que esta se rige por su ética profesional no por personalismos al momento de ejercer su profesión.