Hoy más que nunca, después de 90 años de existencia (1922 -2012), la Naturopatía actúa con una sola voz en defensa de su identidad profesional al máximo nivel y sin complejos. Sería demasiado ingenuo dudar de la fortaleza de la Profesión Naturopática en defensa de sus reivindicaciones históricas. Es cuestión de repasar la historia para conocer como se ha forjado la profesión Naturopática en España desde 1922. Es de esas profesiones que se han hecho a si mismas buscando su espacio e identidad profesional con fuerza, coraje y pundonor.
La Naturopatía, como área del saber humano, como disciplina, ha ido evolucionando con los acontecimientos y con las corrientes de pensamiento que se han ido sucediendo a lo largo de la historia reciente, lo que ha producido situaciones de cambio dentro de esta ciencia, para cuyo conocimiento es necesario abordar los diferentes paradigmas y concepciones que han ido configurando su desarrollo en conjunto con otras ciencias. De ahí la importancia de que el profesional Naturópata comprenda los cambios que se están produciendo para poder adaptarse mejor a las necesidades que van surgiendo, tanto profesionales como de la sociedad a la que oferta sus Servicios.
La Organización Colegial Naturopática FENACO reivindica el derecho a un reconocimiento digno de la labor que el profesional Naturópata ejerce al servicio de la sociedad, con una dedicación vocacional ejercida con calidad, eficacia y eficiencia, dentro del más estricto cumplimiento con la normatividad vigente. Es importante adquirir una formación que permita disponer de los conocimientos y dominar los instrumentos necesarios para el ejercicio de esta muy digna profesión Naturopática; pero además del esfuerzo personal de cada uno por formarse y ser competitivo, también es necesario, por no decir obligatorio, que quienes tienen su responsabilidad en las manos, posibiliten los medios para el libre ejercicio de la Profesión Naturopática, sentencia Eva Jiménez, Presidenta Adjunta de la Organización Colegial Naturopática FENACO.
Nuevamente dejamos constancia de la importancia que representa nuestra profesión en la sociedad actual. Por ello demandamos que se nos permita desarrollar nuestro trabajo en aquellas esferas y ámbitos para los que estamos cualificados y, de paso, erradiquemos la injerencia que estamos sufriendo por parte de otros profesionales y no profesionales que asumen nuestras funciones, además de las suyas propias. Cada área requiere un profesional específico al frente de la misma.
Una profesión fuerte es aquella en la que sus profesionales poseen los conocimientos, las habilidades y las actitudes necesarias para su ejercicio cualificado y de verdadera excelencia. Y este anhelo ha de pasar, por la existencia de mecanismos que hagan posible esa regulación y autorregulación. Como afirma el Presidente de la Organización Colegial Naturopática FENACO, Manuel Navarro, la profesión Naturopática y sus distintas especialidades está en un momento de reconocimiento social y expansión profesional que se debe sobre todo a la mejora de calidad asistencial que estamos impulsando mediante los documentos de autorregulación profesional como son el Estatuto Profesional, el Código Deontológico, los Estándares de Calidad, el Plan de Ordenación General del Sistema Educativo de la Naturopatía , entre otros.
En esta línea está precisamente trabajando la Organización Colegial Naturopática FENACO, con el propósito de legitimar nuestra profesión. Y también por ello es el momento para cualquier profesional Naturópata de incorporarse, si aún no lo ha hecho, a esta organización.