Un naturópata alemán alivia el daño a un paciente de Cefalea de Horton · El enfermo quería quitarse la vida, tomaba quince pastillas diarias y le habían tratado varios neurólogos durante casi doce años
La Cefalea en Racimos o Cefalea de Horton, entre otros nombres por los que se conoce esta enfermedad, se considera que es uno de los dolores más intensos que puede sufrir el ser humano, hasta el punto que se le ha dado el nombre de ‘dolor de cabeza suicida’. “Para vivir con este dolor prefería estar muerto. Es como si alguien coge un pincho ardiendo, con fuego, y te lo va metiendo en la cabeza dando vueltas con la mano como si fuera un destornillador”. Así resumía Mohamed Ibrahim Kamel, conocido familiarmente como ‘Sherif’, el intenso dolor de cabeza que ha sufrido durante casi los últimos doce años hasta que un médico naturalista alemán, Norbert Wittke, afincado en España hace varios años y con consulta en Aguadulce, ha conseguido quitarle los dolores mediante la acupuntura.
A Sherif le habían tratado varios neurólogos sin resultado, llegando a tomar casi una quincena de pastillas diarias, “pero no se me quitaba el dolor y sólo quería morirme. Cuando me daba el dolor quería estar solo, que no me diera la luz, no escuchar la radio ni ver la televisión. Cada vez era peor, me daba golpes en la cabeza y chillaba mucho -recordaba angustiado este paciente egipcio nacionalizado español que lleva veinte años viviendo en Almería- mi mujer entraba en la habitación preguntando qué hacía con los vecinos por los gritos que yo daba y sólo le respondía que se aguantasen, porque el dolor era insoportable. Yo mismo me daba grandes golpes en la cabeza contra la pared y corría al ambulatorio para que me dieran oxígeno que me calmaba algo. Cuando el dolor era fuerte no podía salir a la calle y me daba vergüenza que la gente me viera así. Me dolía hasta el pelo y me daban ataques siete u ocho veces al día. Era fortísimo, no puedo explicarlo. Llegaba un momento que antes de seguir así prefería morir, no quería vivir así. Empezaba a llorar de pena, de dolor, harto de la vida, no podía trabajar, no podía dormir”, relata este instalador de vallas publicitarias a quien la vida le ha cambiado tras la primera sesión de acupuntura que recibió.
“Desde la primera sesión con las agujas noté la mejoría, sólo tenía molestias durante algunos minutos y tras mes y medio con dos sesiones semanales no me duele nada. He vuelto a nacer. Ahora estamos intentando venir a la consulta sólo una vez a la semana. Mi mujer quiere poner la historia en internet para que todos la conozcan, porque mucha gente no sabe qué hacer. Me ha cambiado la vida”, resume risueño Sherif su mejoría. Por su parte el doctor Wittke ha explicado que si todo va bien y no vuelven los dolores, con un total de 15 ó 16 sesiones habrá terminado el tratamiento. Preguntado sobre la causa de la dolorosa enfermedad el naturópata reconoce que “todavía no se sabe la causa, no puedo dar una explicación, la medicina convencional no sabe cómo tratarlo. Sin embargo en la medicina china existen otras reglas de diagnóstico y tratamiento teniendo como base la observación durante cientos y cientos de años. Es una medicina muy sincera porque reconocen que no saben la causa, pero la observación nos ha legado sus conocimientos y su experiencia para que podamos actuar. Nosotros vemos al paciente de forma integral, le colocamos las agujas en los sitios indicados por la milenaria experiencia de la medicina china y obtenemos buenos resultados. Estoy muy contento con este caso”, reconoce Norbert Wittke.
La cefalea en racimos o cefalea de Horton, es un tipo relativamente raro de cefalea que se presenta en forma de ataques y cuya severidad le ha dado el nombre de ‘dolor de cabeza suicida’. Se considera que este dolor es uno de los más intensos que puede sufrir el ser humano. Es una patología bastante desconocida, el paciente puede tardar en ser diagnosticado, ya que es raro que un médico lo atienda en el momento mismo del ataque. Suele ser confundida con sinusitis, migraña o patología dental. Es uno de los síndromes de dolores de cabeza más extraordinarios observados en la práctica clínica. Ser testigo de un ataque de cefalea en racimos es una experiencia difícilmente olvidable. El paciente suele describir el dolor como si el ojo fuera empujado a salir de su órbita, o como cuchillos que se clavan en el ojo. Otros relatan cuchillos al rojo en el ojo. Algunos pacientes se tornan agresivos durante el ataque, rechazan a su familia e incluso algunos intentan el suicidio por la intensidad del dolor. Cada sesión de acupuntura dura unos veinte minutos. Si está usted interesado en obtener más información sobre este asunto médico puede ponerse en contacto con el propio paciente Mohamed Ibrahim en el teléfono 633 10 88 82 o con el doctor Norbert Wittke en el 646 84 11 16.
Fuente: elalmeria.es