Manuel Navarro, presidente de la Federación Española de Naturópatas, Acupuntores y Técnicas Afines (FENACO), aseguró ayer, tras la firma de un convenio de colaboración con Banesto, que la Comunidad Valenciana podría ser la primera en incluir la naturopatía dentro de la Sanidad pública. Según aseguró Navarro durante un encuentro con los miembros de su asociación: “la política sanitaria del partido Popular en la Comunidad Valenciana, mediante convenios con instituciones privadas, es una buena fórmula para lograr este objetivo”. Navarro aseguró haber mantenido un encuentro con Antonio Clemente, responsable de Sanidad del Partido Popular en las Cortes, quien se mostró muy favorable a la firma del acuerdo.
Sin embargo, Clemente aseguró al periódico El Mundo que nunca se ha reunido con los representantes de esta entidad y que por tanto no podía estar ni a favor ni en contra. Navarro también aseguró haberse entrevistado con Encarna Llinares, responsable del área de Sanidad de la ejecutiva del PSPV-PSOE, quien también negó haber mantenido encuentro alguno con Fenaco. Ambos reconocieron haber sido invitados a participar en la mesa redonda que tuvo lugar el pasado mes de febrero, tras la firma del convenio, pero tuvieron que declinar la oferta por tener compromisos anteriores, aunque precisaron que estaban abiertos a un encuentro.
Lucha contra el fraude
Según explicó Navarro, la “profesión de naturópata existe en España desde 1922, y hay un aumento de cerca del 15% anual de las personas que requieren nuestros servicios”, de ahí que el objetivo de la entidad que preside sea el de tener mucho cuidado con los que prometen curaciones milagrosas, porque no es cierto”, precisa.
Según datos de Fenaco, en la Comunidad Valenciana cuentan con 508 afiliados (175 en Alicante, 59 en Castellón y 274 en Valencia) que realizaron cerca de 150.000 consultas el año pasado.
Alternativa a la medicina
“Hablar de naturopatía como medicina alternativa es una locura, porque medicina sólo hay una”, asegura Manuel Navarro. “Lo que si es correcto es hablar de alternativa a la medicina”, “que alguien se denomine médico alternativo o naturista es de juzgado de guardia” añade.
Navarro explica que un naturópata actúa siempre con el diagnóstico de un médico, y cuando encuentra un proceso patológico lo remiten a un profesional de la medicina. “Nuestros programas de salud, además, tienen más una finalidad más educativa que terapéutica”, de ahí que no exista conflicto entre unos y otros.
Navarro reconoce que algunas de las casi 200 especialidades de la naturopatía no tienen base científica, pro lo que reclama más recursos para investigación.
Fuente: Javier Cabanilles / El Mundo