El presidente de la Federación de Autónomos ATA, Lorenzo Amor, ha reclamado hoy una “verdadera” rebaja fiscal, con un tratamiento “totalmente diferente” para pequeñas empresas, y ha rechazado que se pretenda vincular la bolsa de fraude en España a los autónomos que tributan en el sistema de módulos.
En la inauguración del primer foro de emprendedores y autónomos organizado por ATA Cantabria, en presencia del presidente cántabro, Ignacio Diego, y del alcalde de Santander y presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Íñigo de la Serna, Amor ha reconocido la necesidad de la reforma fiscal.
Pero ha recalcado que “rebajar impuestos no es bajar unos para subir otros” y tampoco la solución puede ser reducir impuestos directos y subir los indirectos.
A su juicio, el “problema fiscal” en España no es “el cuánto ni el cómo se recauda”, sino “el cuánto y el por qué de lo que se defrauda”, un fraude que rechaza que se achaque al sistema de módulos en el que cotizan 600.000 autónomos.
“A veces sobra teoría y falta calle”, ha sentenciado en relación a las reflexiones del grupo de expertos en este sentido.
Amor también ha rechazado que se proponga rebajar cuatro puntos las cotizaciones sociales y subir el IVA, porque la primera medida le va a ahorrar al tejido empresarial 1.500 millones de euros al año, pero aumentar el IVA conlleva su “ahogo económico”.
En opinión del presidente de ATA, al que acompañaba la presidenta de la organización en Cantabria, Ana Cabrero, lo que hace falta es una “verdadera rebaja fiscal” que aumente el poder adquisitivo de los ciudadanos y, con ello, la demanda, el consumo y el empleo.
En este sentido, reconoce que ya se aprecia un “cambio de tendencia” en la economía y recuerda las previsiones de su organización, que augura un crecimiento del 1,3 % para la economía española en 2014 y la creación de 200.000 empleos netos, 50.000 de ellos en el sector de autónomos.
Pero ha opinado que esa mejoría no debe mover a la “complacencia” ni a pensar que “todo está hecho” porque, según dice, quedan reformas por abordar para conseguir que la mejora en los datos macroeconómicos llegue a la economía real.
Entre las asignaturas pendientes, Lorenzo Amor ha señalado la necesidad de más fluidez en el crédito, en concreto, en la “microfinanciación”, que es donde aprecian un “gran atasco”.
También ha insistido en la importancia de reducir la morosidad, no sólo en el sector público, que ha hecho un esfuerzo por acortar los plazos de pago, aunque aún no se alcancen los 30 días que marca la ley, sino también en el sector privado.
Según dice, cuanto mayores son las empresas, más tarden en pagar a sus proveedores, y ha criticado en especial a algunas empresas del Ibex 35 que “presumen de ser socialmente responsables” y, sin embargo, tardan “más de cinco meses” en pagar.
Por ello, ha reclamado un régimen sancionador para las entidades que utilicen esta “mala praxis”.
Lorenzo Amor ha aprovechado para felicitar al presidente de la FEMP por el esfuerzo de las administraciones locales para reducir la morosidad, y también al jefe del Ejecutivo cántabro porque la región “ya está en el pelotón de los buenos pagadores”.