“Todo el mundo tiene derecho a la vida y a la salud, pero esto también implica el derecho subyacente del ciudadano a contar con diferentes alternativas para obtenerlas. Nadie merece ser obligado a atenerse a una única opción. Los monopolios nunca han sido sinónimos de libertad. De hecho, en diferentes países de Europa, la seguridad social cubre tanto la medicina oficial como otras tendencias más naturales. Esto le ofrece al paciente la posibilidad de elegir, lo cual es un derecho fundamental de la existencia”. Rocío Gil, directora del Centro de Naturopatía Alimentaria Solnatura.
El disponer de centros naturopáticos profesionales en nuestro país, que eduquen a las personas en relación a tener una vida saludable, es algo muy valioso y muy positivo para nuestra sociedad. La naturopatía es una profesión muy valiosa y necesaria. Se lleva aplicando desde hace miles de años, desde que el hombre es hombre; solo por ello merece contemplación y respeto. El enfoque de desprestigiar a este sector a base de generalidades y comentarios con connotaciones invalidantes no es para nada acertado ni positivo.
La OMS (Organización Mundial de la Salud) en una publicación reciente , anuncia su estrategia para los próximos años de incorporar las medicinas históricas a los sistemas de salud pública. Esto incluye la Medicina Tradicional China y la Naturopatía.
Para la OMS, la combinación de ambos tipos de medicina es potencialmente beneficiosa y supone una aportación de lo más necesaria y deseable como solución al aumento de enfermedades crónicas en el mundo y como herramienta para conseguir un aumento de las expectativas de vida, gracias a la prevención por medio de métodos naturales y respetuosos con el cuerpo humano y con el medio ambiente.
La propuesta de denunciar las malas prácticas es correcta, pero esta debe ser aplicable a cualquier ámbito de malas prácticas. Las malas prácticas tienen lugar en todas las profesiones y por lo tanto, la ley debe ser aplicable a cualquier profesión. Creo que el gobierno debería adoptar el punto de vista de la OMS en este aspecto. Debería mostrar una buena disposición hacia la interrelación cordial de la medicina y la naturopatía. La naturopatía es histórica, y bien aplicada, supone un gran añadido a esta sociedad.
No se debe permitir el que sea perseguida, desprestigiada, dejada de lado o minimizada. “Los médicos no tienen nada que ver con los naturópatas y los naturópatas no tienen nada que ver con los médicos, pero juntos, colaboran y se pueden ayudar. De hecho, en España, hay grupos de naturópatas, médicos, farmacéuticos etc, que trabajan conjuntamente y en equipo para ayudar mejor a las personas. Los monopolios, la intención de quedarse con todas las porciones del pastel, a la larga va a llevar al detrimento de la calidad sanitaria española y al perjuicio consecuente del ciudadano”. Miguel Angel Ruiz, Naturópata colegiado de FENACO, escritor y locutor de Radio Intereconomía.La impresión que queda después de leerla, es que la Naturopatía está asociada a malas prácticas profesionales en general, lo cual no puede estar más lejos de la realidad.
Existen negligencias y prácticas poco profesionales en el campo de la naturopatía, pero también existen negligencias y prácticas poco profesionales en el campo de la medicina y en cualquier otro campo profesional. El enfoque de la PNL (Propuesta No de Ley) de Ciudadanos sugiere una especie de “caza de brujas” de médicos hacia naturópatas.
Es un enfoque que anima a que ambas profesiones se pongan en contra, lo cual no es nada positivo ni a larga fomenta la salud pública ni los derechos humanos. La Naturopatía es una profesión basada en el sentido común y en la obtención de salud a través de la naturaleza. Respirar aire puro, bañarse en agua de mar, los masajes, el consumir alimentos saludables y nutrientes de calidad, hacer ejercicio… eso es, en esencia, la Naturopatía. En el artículo se está usando la palabra “pseudociencia” o “terapia alternativa” muy a la ligera y de manera bastante imprecisa. Cuando en esta propuesta Ciudadanos usa esas palabras, está generalizando y tomando a justos por pecadores.
Debido a la gran variedad de prácticas que se llevan a cabo dentro del marco de la naturopatía, y debido a los diferentes niveles existentes de rigor y profesionalidad en su aplicación, no es justo que se meta a todos en el saco de “pseudociencia” o “terapias alternativas”. Son términos generalistas, despectivos y en cierto modo abusivos ya que conllevan la intención de suprimir e infravalorar a todo este sector.
La clave está en discernir; en poder diferenciar hechos y conceptos sin caer en las generalidades o globalizaciones innecesarias. El sector de las Ciencias Naturopáticas está lleno de grandes profesionales. La naturopatía y la medicina son dos profesiones muy distintas. La naturopatía alimentaria, por ejemplo, lo que busca es un equilibrio preventivo basado en la buena alimentación y unos buenos hábitos de vida.
No es una “terapia alternativa” ni pretende sustituir ni suplantar a la profesión médica en ningún aspecto. No tiene nada que ver con ello. La medicina es muy necesaria y hoy en día son vitales los métodos de diagnóstico, tratamiento y cirugía existentes, los cuales salvan muchas vidas y mantienen la salud pública. De eso no cabe duda. Pero estos métodos no tienen por qué ser para nada incompatibles con las prácticas profesionales que se llevan a cabo en los campos de las Ciencias Naturopáticas, siempre y cuando se esté hablando de naturópatas o naturópatas alimentarios éticos, que se atienen al código deontológico de su profesión (como son los naturópatas colegiados de OCN FENACO).