Es posible que haya escuchado sobre este poderoso antioxidante cada vez más en los últimos años. Los beneficios del glutatión, como dar a la piel un brillo saludable, la capacidad de igualar el tono y el brillo de la piel, han recibido mucha atención en los medios. El glutatión funciona naturalmente en el cuerpo para inhibir la producción de melanina y, por lo tanto, puede reducir la concentración de pigmento en la piel, al tiempo que ayuda a apoyar el metabolismo hormonal adecuado y el efecto de otros daños ambientales de la piel, como la exposición al sol y la contaminación.
Sin embargo, el glutatión hace mucho más en el cuerpo que solo combatir los signos del envejecimiento y mejorar el tono de nuestra piel. Actúa como el centro de nuestra red antioxidante, como un eliminador de radicales libres y es un componente importante de la desintoxicación del hígado. Su importancia en el equilibrio oxidante y en muchas otras vías han llevado al estudio del glutatión como tratamiento de apoyo en muchas preocupaciones médicas como la enfermedad de Parkinson, la atención complementaria contra el cáncer, la enfermedad cardiovascular y como parte de un completo apoyo pre y post quirúrgico.
Aumentar sus niveles de glutatión puede ser un poco complicado. No se absorbe bien a través del tracto digestivo cuando se toma como suplemento. Una de las mejores maneras de aumentar los niveles de glutatión es administrarlo por vía intravenosa. Esto permite una absorción óptima de una manera rápida, segura y efectiva.
Si bien la suplementación y la ingesta dietética no suelen ser efectivas para aumentar los niveles de glutatión, existen algunos apoyos además de la terapia intravenosa. Una de las formas más efectivas de apoyar sutilmente el glutatión a través de la dieta es a través de la ingesta de brotes de brócoli crudos. Si bien no está al mismo nivel que la terapia intravenosa, esta puede ser una forma muy segura y efectiva de aumentar el glutatión independientemente de la edad o la elegibilidad para la terapia intravenosa.