Área de conocimiento: Tecnología Naturopática o Naturopatía Aplicada: Módulo: Estímulos Naturales: “Los efectos del envejecimiento en la piel La respuesta de la sangre a los baños tibios, fríos y de contraste tibios y fríos”

Petrofsky, J., Lohman, E., Lee, S., Cuesta, Z. D. L., Labial, L., Iouciulescu, R., … & Malty, A. A. (2007). The effects of aging on the skin blood response to warm, cold, and contrast warm and cold bathsPhysical & Occupational Therapy in Geriatrics, 25(3), 19-33. 

OBJETIVOS: Examinar los efectos del envejecimiento sobre la capacidad de los baños de contraste para aumentar la circulación en la piel del pie en comparación con la inmersión en un baño continuo de agua tibia de la misma temperatura que el componente tibio del baño de contraste.

MÉTODOS: Se usó un medidor de flujo Doppler láser para evaluar el flujo sanguíneo de la piel en los aspectos dorsal y plantar del pie durante la inmersión en un baño tibio (100 ° F (37.8 ° C)) en comparación con baños de contraste con una proporción de 3 minutos de tibio (100 ° F (37.8 ° C)) y 1 minuto de frío (60 ° F (15.6 ° C)); El ciclo se repitió durante 16 minutos. Catorce participantes cuya edad promedio fue de 55.1 ± 9.1 años fueron examinados y comparados con 12 participantes más jóvenes cuya edad promedio fue de 23.9 ± 5.8 años.

RESULTADOS: Para ambos grupos de participantes, el uso de temperaturas alternadas de baños fríos y calientes provocó un aumento en el flujo sanguíneo de la piel por encima de lo que se encontró con la inmersión en agua tibia sola. La mayor respuesta fue en los participantes más jóvenes. Para los participantes mayores, el flujo sanguíneo de la piel fue aproximadamente un tercio menor que el observado en los participantes más jóvenes con inmersión continua en agua tibia o baños de contraste. Estos mismos resultados se observaron en los aspectos dorsal y plantar del pie, lo que indica una disminución de la circulación en ambas áreas con el envejecimiento.

CONCLUSIÓN: Llegamos a la conclusión de que los baños de contraste aumentan la circulación en la piel del pie de las personas mayores, pero la respuesta fue menor que la de las personas más jóvenes.