Hewison, M. (2012). Vitamin D and the immune system: new perspectives on an old theme. Rheumatic Disease Clinics, 38(1), 125-139.
La interacción con el sistema inmune es uno de los efectos no clásicos más bien establecidos de la vitamina D. Durante muchos años se consideró que esto era una manifestación de enfermedades granulomatosas como la sarcoidosis, donde la síntesis de la 1,25-dihidroxivitamina D 3 activa (1). , 25 (OH) 2 D 3 ) se sabe que está desregulado. Sin embargo, informes recientes han respaldado el papel del 1,25 (OH) 2 D 3 en la mediación de la función normal de los sistemas inmunes innato y adaptativo.
Fundamentalmente, estos efectos parecen estar mediados por la síntesis localizada autocrina o paracrina de 1,25 (OH) 2 D 3 del precursor 25-hidroxivitamina D 3 (25OHD 3), el principal metabolito circulante de la vitamina D. Como tal, la capacidad de la vitamina D para influir en la inmunidad humana normal dependerá en gran medida del estado de la vitamina D de los individuos, y puede dar lugar a una respuesta aberrante a la infección o autoinmunidad en aquellos que son vitamina D-insuficiente.
La importancia potencial para la salud de esto se ha subrayado al aumentar la conciencia sobre el estado deteriorado de la vitamina D en poblaciones de todo el mundo.
El siguiente artículo de revisión describirá con más detalle algunos de los desarrollos recientes con respecto a la vitamina D y el sistema inmunitario, junto con posibles implicaciones clínicas.
CONCLUSIONES: Han pasado casi treinta años desde que se documentó por primera vez una interacción entre la vitamina D y el sistema inmunitario. Aunque esto se propuso inicialmente como un efecto no clásico de la vitamina D asociada con enfermedades granulomatosas, nuestra visión actual ahora ha cambiado considerablemente. Estudios recientes han demostrado un papel fisiológico potencial para la vitamina D en la regulación de la inmunidad innata y adaptativa normal. Los estudios futuros ahora deberán centrarse en las implicaciones clínicas de la inmunidad mediada por la vitamina D y, en particular, los posibles efectos beneficiosos de la vitamina D suplementaria con respecto a las enfermedades infecciosas y autoinmunes.