¿De qué te sirve verte bien por fuera y estar podrido por dentro?. Esa fue la frase de una querida amiga refiriéndose a la modalidad de mucha gente hoy en día, de solo verse bien y estar fit por fuera mientras que por dentro viven con muchas emociones y pensamientos no muy sanos. De eso se trata la vida naturista, le comenté. Y ella me inspiró a hacer este post.
En mis blogs pasados he escrito sobre la vida holística y de las cinco cosas que debes procurar para ser feliz, estar sano y tener éxito estas son: emociones sanas, mente tranquila, esencia plena, un cuerpo activo y alimentarte conscientemente. Hoy te voy hablar de emociones sanas y de por qué es lo primero en esta lista de cinco cosas.
Recuerdas que comenté que por experiencia propia aprendí que calidad de vida es más que comer balanceado y hacer ejercicios. Pues sí, dime tu si como yo, no ves que hay mucha gente por ahí comiendo ensalada, bebiendo batidas y yendo al “gym” pero no se dan cuenta que andan con una nube gris en la cabeza de la amargura que cargan, o un mono trepao’ en el cuello de la carga estresada que tienen, que digo un mono! Casi un gorila cargan! O andan así como “El Grinch” regando veneno a todo el que se le acerque, y no regalan ni una sonrisa. Pues si! Y te confieso en algún momento de mi vida esa fui yo, y era porque no me daba cuenta de la importancia que tenían en mi y en mi vida las emociones.
Y es que te cuento, así como comemos diariamente comida para llenar nuestra panza y tener energía física, también nos alimentamos diariamente de emociones para energizar nuestro ser. Y si, al igual que la comida, que hay comida buena que nos hace bien y nos dan energía, y hay comida chatarra que intoxica y enferma, así mismo también hay emociones que son buenas nos dan energía y nos mantienen motivados, y también hay emociones negativas que nos envenenan el alma y nos enferman.
Sin darnos cuenta, así vamos por la vida día a día tragando emociones, unas las procesamos y “las digerimos” otras no, las que no procesamos se quedan ahí dentro bloqueadas y sí literalmente llegan al hígado, así como dice un refrán cuando alguien te cae mal: “me cae en la punta del hígado”. Estas emociones bloqueadas hacen tres cosas: se convierten en dolor, se convierten en enfermedad o intervienen en las decisiones que tomamos y en como actuamos diariamente. Sí, tus actitudes y tu motivación dependen de las emociones que sientes. Es importante que sepas algo, las emociones nos llevan a actuar y tomar decisiones. Muchas veces actuamos por miedo, otras por coraje, otras por alegría, que sería lo ideal siempre. De hecho, las emociones también están detrás de las decisiones que tomas al alimentarte. Muchos trastornos alimenticios conocidos como la obesidad, la bulimia y anorexia se desarrollan por disturbios emocionales.
Aquí te explique cómo tus emociones están involucradas con tu salud, las relaciones, la comida e incluso el éxito.
La vida holística nos ofrece formas de digerir las emociones no muy agradables para que no impidan tu felicidad, tu salud y tu éxito. Te doy un adelanto. El primer paso es estar consciente de ellas, ósea identificar cuando, qué y dónde sientes emociones básicas como: tristeza, enojo, preocupación o alegría. Por eso es tan importante la autoconciencia de ti y vivir el aquí y ahora. Esto se logra a través de hábitos que vas implementando poco a poco en tu rutina diaria. Uno de estos hábitos es conectar con la naturaleza. Entre otros que aprenderás si te unes a mi tribu naturista.
No permitas que las emociones negativas te pudran. Todos tenemos la misma oportunidad de aprender herramientas para digerir mejor nuestras emociones, así mismo como aprendemos un nuevo estilo de comer, podemos empezar nuevos hábitos para que las emociones del día a día no nos caigan mal y nos indigesten la vida.