Cuando sienta que le está haciendo cosquillas por una infección (dolor de garganta, inflamación de los ganglios linfáticos, ardor al orinar, etc.) o como prevención durante un período de riesgo.
⏩Ajo : gracias a sus compuestos azufrados, es un excelente antibiótico natural. Lucha contra un gran número de bacterias patógenas que no desarrollan resistencia contra él. También es eficaz contra ciertos virus, en particular el de la gripe.
Además, el ajo tiene muchas otras virtudes: lucha contra el colesterol, anticoagulante, protector cardiovascular … lo que lo convierte en un auténtico “alimento”.
-> Vía comida (1 cápsula por día) o como complemento alimenticio (respetar la dosis y las contraindicaciones dadas por el fabricante)
⏩Propóleo : como todos los productos apícolas, el propóleo tiene muchos beneficios para el organismo. Es antimicrobiano, antiviral, antiinflamatorio y antioxidante. Es muy eficaz en la lucha contra las infecciones otorrinolaringológicas pero también contra el herpes, la vaginitis, las verrugas…
-> Disponible en diferentes formas y en diferentes concentraciones según el problema: spray, chicle, ampollas…
⏩Aceites esenciales: Antivírico, antibacteriano, antifúngico, siendo aquí las estrellas el árbol del té y el ravinstara. O el noble laurel, menos conocido pero un virucida muy poderoso.
-> 2 gotas debajo de las plantas de los pies por la mañana y por la noche durante el invierno para niños + en los antebrazos para adultos o en masaje en la garganta o alrededor del oído en caso de dolor, o en una cucharada de miel o aceite de oliva para el dolor de garganta, hacen maravillas.
2 / Mantener nuestras primeras líneas de defensa:
Para evitar que los patógenos se infiltran, habrás entendido que debemos cuidar nuestra piel, nuestras mucosas, nuestras diversas flora y secreciones, controlar la respuesta inflamatoria y tener la energía suficiente para tener una buena fiebre si es necesario.
⏩Probióticos : al proporcionar miles de millones de bacterias “amistosas”, ayudan al cuerpo a recomponer una flora en eubiosis que evitará que las bacterias patógenas se asienten. Esta flora protegerá la mucosa digestiva para evitar la porosidad intestinal. También permitirá que los alimentos se digieran y descompongan mejor para obtener energía y moléculas menos mal digeridas, que podrían reconocerse como patógenos.
Además, la flora trabajando en colaboración con las células inmunes, la respuesta también será más efectiva si un patógeno logra infiltrarse.
-> Curación de probióticos en cápsulas, en farmacias o tiendas ecológicas (prestar atención a los tipos de cepas, su número y la forma galénica que debe ser gastrorresistente).
O a través de los alimentos, para el mantenimiento con bebidas, verduras y alimentos fermentados con lacto.
⏩Prebióticos : alimento real para bacterias buenas, promueven la riqueza y diversidad positiva de nuestra flora.
Estas son las fibras que se encuentran en frutas, verduras y cereales integrales o legumbres. Estas moléculas (almidones resistentes, fructanos, betaglucanos, etc.) no son digeridas por el intestino delgado y por tanto llegan intactas al colon para nutrir nuestra microbiota.
-> Aquí hay alimentos ricos en prebióticos: cereales integrales (trigo, centeno, cebada, avena, etc.), legumbres (frijoles, lentejas, guisantes, frijoles, garbanzos, etc.), verduras (puerro, espinaca , espárragos, col verde, remolacha, zanahorias, etc.), frutas (frambuesas, ciruelas pasas, uvas secas, etc.), nueces (almendras, nueces, etc.), frutas y verduras almidonadas (papa, alcachofa de Jerusalén, plátano, etc.) …
⏩Ácidos grasos esenciales : es fundamental tener una buena proporción entre omega 3 y 6 que forman, entre otras cosas, nuestras membranas celulares y por tanto todos nuestros tejidos. Una buena proporción es garantía de la fluidez de nuestras membranas para una mejor resistencia a los ataques entre otros.
En nuestra dieta actual encontramos 30 omega 6 a 1 omega 3 mientras que la proporción debería ser de 4 a 1. Un buen equilibrio de lípidos es fundamental para el bienestar del sistema nervioso. Por tanto, los omega 3 nos protegen del estrés, nos permiten tener tejidos sanos y por tanto barreras sólidas, y protegen contra la inflamación de bajo grado que agota nuestro sistema inmunológico, etc.
-> Limite su consumo de omega 6 (aceite de girasol, aceite de palma, maíz, carnes rojas, etc.) y aumente considerablemente su consumo de omega 3 (semillas y aceite de linaza, aceite de colza, nueces, germen de trigo , pescados grasos como sardinas, salmón, arenque, fletán …)
⏩Vitamina E : potente antioxidante, también permite una mejor eficiencia de un determinado tipo de glóbulos blancos de inmunidad innata (neutrófilos), al tiempo que previene la sobreinflamación, particularmente en el contexto de infecciones pulmonares en personas. mayor.
-> Asegúrate de tener una dieta variada y equilibrada. La vitamina E se encuentra en semillas, oleaginosas, cereales integrales o semicompletos, legumbres, huevos, plátanos …
⏩Glicoproteínas : son proteínas ligadas a azúcares que forman pequeñas antenas en las paredes celulares para una mejor defensa y una mejor comunicación celular. La glicobiología es una ciencia bastante reciente. En febrero de 2003, el prestigioso “MIT” (Instituto de Tecnología de Massachusetts) citó a la gliconutrición como una de las 10 tecnologías emergentes que cambiarían el mundo del mañana. Este es el estudio en nuestro organismo de 8 azúcares simples esenciales que deben aportarse en proporciones equilibradas. El problema es que consumimos más de 2 de estos 8 azúcares (glucosa y galactosa) mientras que los otros 6 son deficientes (fucosa, manosa, xilosa, N-acetil-neurimato, N-acetil-glucosamina, N-acetil-galactosamina).
-> Aquí hay una lista no exhaustiva de alimentos que contienen estos azúcares para consumir con más frecuencia: algas (ulva, alga, laminaria), hongos de ambientes naturales (shiitake, reiki), pectina de frutas, ajo, levadura, carne coco, aloe vera, fenogreco, equinácea, otras plantas como malvas, malvaviscos, grosellas negras, hibisco, avena, cebada. La leche materna contiene 6 de estos azúcares esenciales.
⏩Manejo del estrés : bajar los niveles de cortisol es esencial para las personas que están regularmente ansiosas o con estrés crónico. El exceso de cortisol aporta moléculas proinflamatorias y acidez que alterarán nuestros tejidos, ya sea el estómago, el tracto digestivo, la red venosa y arterial, la piel … Además, las hormonas del estrés reducen la respuesta inmune.
-> Practica técnicas de relajación, coherencia cardíaca, una actividad física que te guste… Ver mi artículo sobre manejo del estrés.
⏩Dejar de fumar : el tabaco altera la mucosa del tracto respiratorio y, en particular, la estera mucociliar que se supone atrapa los patógenos y los evacua.
-> La hipnosis o las terapias conductuales dan buenos resultados si quieres ayuda.
⏩Actividad física : al acelerar la frecuencia cardíaca, aumenta el flujo sanguíneo y la cantidad de litros de sangre filtrados por minuto. Por lo tanto, son más desechos y toxinas los que se filtran y eliminan por los riñones, el hígado y la piel. El cuerpo está menos obstruido, todos los procesos fisiológicos funcionan mejor, los tejidos están menos obstruidos y se recupera la energía.
-> Realice al menos 30 minutos de actividad moderada a intensa por día.
⏩Sueño: dormir al menos 7 horas es fundamental para recuperarse y dejar que el cuerpo haga el mantenimiento mientras la energía no se desvíe por la digestión, la actividad intelectual o el estrés. El sueño sigue estando mal documentado y aún oculta su parte de misterios. Pero los estudios muestran que la falta de sueño se correlaciona con una ingesta más frecuente de antifúngicos y parasiticidas, y con infecciones virales o bacterianas más frecuentes.
También se ha comprobado que dormir 4 horas menos reduce en un 30% la actividad de las células NK, un tipo de linfocitos encargados de matar células anormales que podrían volverse cancerosas.
-> Los trastornos del sueño no son inevitables. Investigando y trabajando sobre las causas (orgánicas, psicológicas, emocionales, ausencia de rituales de preparación para el sueño, etc.) podemos superarlas y prescindir de las drogas que no participan en una buena recuperación alterando los ciclos del sueño. Consulta a un Naturópata o habla con tu médico y pide que te deriven a métodos naturales (flor de Bach, hipnosis, aceites esenciales, fitoterapia, reforma alimentaria, fototerapia, higiene del sueño, etc.)
3 / Actuar sobre la respuesta inmunitaria:
En el caso de que el patógeno haya ingresado al organismo, la respuesta adaptativa debe ser efectiva y también dependerá de los glóbulos blancos de la respuesta innata. Para ello, el organismo necesita una determinada cantidad de nutrientes que no deben faltar por el dolor de no funcionar bien. También se pueden utilizar medicamentos a base de hierbas, micoterapia u oligoterapia para dar un impulso adicional.
⏩Vitamina D : es producida por el cuerpo a través de la exposición de la piel al sol y desempeña una serie de funciones en el cuerpo. Lo que nos interesa aquí es su acción sobre la inmunidad y muchas investigaciones han demostrado que la deficiencia de vitamina D se correlaciona con infecciones virales más frecuentes y más prolongadas. Además, hablamos de “infecciones invernales” especialmente por gripe, mientras que los virus están presentes todo el año. En Francia, de octubre a abril, los rayos del sol no son lo suficientemente potentes como para permitirnos sintetizar suficiente vitamina D.
Hoy en día, más de la mitad de los franceses tienen deficiencia.
La vitamina D también actúa como modulador de la respuesta inmune y mantener un nivel constante ayuda a combatir las enfermedades autoinmunes.
-> A partir de abril exponerse al sol todos los días durante al menos 10 min a 20 min en el rostro y antebrazos sin protector solar y cuidando que la piel no se enrojezca. Para las pieles más frágiles, hay que ir de forma gradual, por supuesto. A partir de octubre, asegúrese de suplementarse con vitamina D3, 200 UI por día para el mantenimiento si no tiene deficiencia.
⏩Zinc: es uno de los oligoelementos más importantes para una buena inmunidad, además de ser un cofactor esencial en la lucha contra la oxidación.
Según diferentes estudios, se han destacado varias funciones del zinc en la inmunidad. Favorece la multiplicación de linfocitos T permitiendo reducir la duración de la infección. También disminuye la inflamación crónica que agota y altera el sistema inmunológico.
-> En los alimentos encontramos zinc: en mariscos (especialmente ostras), pescado, levadura de cerveza, cereales integrales, oleaginosas, determinadas verduras, algas y huevos.
También es posible complementar en caso de deficiencia comprobada (a menudo a partir de los 60 años, para vegetarianos o personas que sufren de mala asimilación en el contexto de enfermedades inflamatorias del intestino), pero tenga cuidado en exceso, puede ser tóxico. . Busque asesoramiento profesional. La forma que se absorbe mejor es el bisglicinato de zinc.
⏩Vitaminas A, C, E : niveles insuficientes impiden que la respuesta inmune sea eficaz. La vitamina C ayuda, entre otras cosas, en la producción de linfocitos T y B en cantidades suficientes. La vitamina E, como hemos visto, estimula la inmunidad innata lo que permitirá una mejor eficacia de la respuesta adaptativa por presentación del antígeno. Finalmente, la vitamina A estimulará aquí la producción de anticuerpos por los linfocitos B.
-> Favorecer una dieta equilibrada, variada, colorida y cruda en la medida de lo posible para la vitamina C, porque es muy frágil tanto al calor como al aire. Se encuentra en fresas, cítricos, grosellas negras, pimientos, berros, coles de Bruselas … Para la vitamina A, come regularmente zanahorias o jugo de zanahoria, batatas con piel, calabaza, espinacas pero también de vez en cuando pavo o despojos de pollo o hígado de res.
⏩Quercetina: es el más poderoso de los flavonoides, un antioxidante por tanto que combate el estrés oxidativo y que por tanto tiene un plan de acción muy amplio y global en el organismo. Uno de esos papeles importantes aquí será disminuir la inflamación crónica y las reacciones alérgicas que distraen al sistema inmunológico de causas más urgentes. Por lo tanto, tiene una acción global que calmará el sistema inmunológico para que sea mucho más eficiente y preciso en la lucha contra patógenos reales.
-> ¡A través de los alimentos vegetales, busque el color! La quercetina se encuentra naturalmente en buenas cantidades en las cebollas rojas, manzanas, ciertas bayas (arándanos silvestres, bayas de saúco negro, grosellas negras), brócoli, chocolate amargo y nueces.
Como complemento, prefiera una forma natural y liposomal que sea garantía de una buena asimilación a través de su recubrimiento lipídico.
⏩Plantas: la más conocida por aumentar la inmunidad es la equinácea (prefiera el astrágalo para mayores de 65 años) para combinar con la baya del saúco, lo que aumentará la respuesta innata. La equinácea permite incrementar el número de leucocitos circulantes y su capacidad de fagocitar para acelerar la entrada en juego de la respuesta adaptativa.
-> Como cura desde el inicio de los síntomas o como prevención, las plantas existen en diferentes formas galénicas: tintura madre, infusión o extracto seco en cápsulas.
Se recomienda no tomar equinácea en el contexto de enfermedades autoinmunes que tienen una mayor necesidad de modular o calmar el sistema inmunológico.
⏩Reishi, shitake, maitake, setas ostra : ricas en betaglucanos (polisacárido), estas setas medicinales nos aportan, entre otras cosas, los famosos azúcares simples que tanto faltan y que permiten una mejor comunicación entre todas las células inmunes. Utilizados durante miles de años en la farmacopea tradicional china, sus hongos son verdaderos pequeños médicos tanto que aportan beneficios para el cuerpo. A ellos se les dedica una rama de la fitoterapia y está en auge, es la micoterapia.
-> Vía comida o como complemento alimenticio, cuidar el origen y cultivo de estos hongos que deben ser orgánicos. De hecho, los hongos tienen la particularidad de absorber toxinas de su entorno.
⏩Cloruro de magnesio : el cloruro de magnesio o sal de nigari por su forma natural participa en el funcionamiento general del cuerpo a través de su contenido de oligoelementos. Como parte de una buena inmunidad, aumenta la cantidad de glóbulos blancos y su capacidad para fagocitar, mientras combate la fatiga y promueve una buena eliminación de desechos.
-> Diluir 1 cucharada de sal de nigari en 1 litro de agua y tomar 1 vaso de 20 cl por la mañana y por la noche durante 3 semanas para la prevención. En caso de infección aguda, tome 1 vaso cada 3 horas el primer día, luego 1 vaso cada 6 horas los dos días siguientes, luego 1 vaso por la mañana y por la noche durante 1 a 2 semanas.
El cloruro de magnesio puede hacer que las sales sean líquidas, también combate el estreñimiento, adapte las dosis en consecuencia.
Por lo tanto, una buena inmunidad se basa sobre todo en un estilo de vida saludable. Algunos remedios pueden ayudar, pero se trata de trabajar sobre el terreno mediante la dieta, la actividad, el sueño y el manejo del estrés. Luego, dependiendo de ciertos períodos (fatiga severa, pico de epidemias, edad, convalecencia, fuera de temporada …), en ocasiones es necesario tomar algunos suplementos porque nuestra dieta actual, utilizando técnicas de industrialización y rinde, es mucho más pobre en vitaminas, antioxidantes y oligoelementos que hace 50 años. Nuestros intestinos también son mucho más abusados por el gluten del trigo o la caseína de la leche, que son menos digeribles que en el pasado, lo que no ayuda a una buena asimilación. Y últimamente hay algunos factores en los que no
Preste atención a los mensajes que su cuerpo le envía para detectar estos períodos de debilidad y ponga tanta energía como sea posible al servicio de su salud.