Si como hemos dicho el 2017 ha sido un año con muchas luces y con algunas sombras para el colectivo de autónomos, desde la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA confiamos en que 2018 sea el año de los autónomos, el año en el que se mejore la protección social de los trabajadores por cuenta propia y se pongan en marcha medidas tan importantes como el régimen sancionador para combatir la morosidad. “El 2018 será un año de consolidación para los autónomos y de recuperación para otros muchos que llevan retraso en la salida de la crisis”, señala Lorenzo Amor, presidente de ATA.
En 2017 entró en vigor la Ley de Reformas Urgentes del Trabajo Autónomo, con algunas medidas como las relacionadas con maternidad y conciliación, así como las relativos a las bonificaciones para la contratación a familiares y discapacitados, la compatibilización del 100% de la pensión de jubilación y la actividad por cuenta propia siempre que tengan al menos a un trabajador a su cargo.
2018 arrancará con nuevas medias que completan la Ley de Reformas Urgentes del Trabajo Autónomo. Dichas medidas son las siguientes:
Ampliación de la tarifa plana: de seis a doce meses el periodo en el que el autónomo sólo tiene que pagar 50 euros. A partir del mes 13, y hasta el 18, la deducción será de un 50% de la bonificación. A partir de esa fecha, y hasta los dos años, el autónomo se beneficiará de una deducción del 30%. Esperamos que 150.000 autónomos se den de altas con la tarifa plana, de los que 70.000 vendrán de la economía sumergida.
Deducciones fiscales: Los autónomos podrán deducirse 26,67 euros diarios en el IRPF por gasto de manutención, cuando afecta directamente a la actividad en territorio español, el doble si se pernocta. Es imprescindible justificar pago telemático. Si es en el extranjero, y se pernocta, la deducción es el doble, de hasta 48 euros.
Además, los autónomos podrán deducirse un 30% de los gastos de suministros, como el agua, la luz y telefonía, siempre que se trabaje desde casa.
Altas y bajas: los autónomos podrán darse tres veces de alta y de baja en el mismo año y sólo pagarán desde el día efectivo que se dan de alta o de baja en el RETA y no todo el mes como hasta ahora.
Cambio de la base de cotización: los autónomos podrán cambiar hasta cuatro veces en el mismo año su base de cotización, en función de sus intereses e ingresos y así adecuar su base a sus ingresos reales.
Recargos por retrasos: Se reducen los recargos por retraso en los pagos a la Seguridad Social a la mitad, pasando del 20% al 10% en el primer mes.
Jubilación: los autónomos que se jubilen, unos 60.000 en 2018, empezarán a cobrar su pensión al día siguiente de jubilarse y no el primer día del mes siguiente como se hacía hasta ahora.
MOROSIDAD
Desde la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, ATA, esperamos que 2018 sea el año en el que se establezca el régimen sancionador de la morosidad. El Parlamento deberá legislar sobre la proposición de ley que establece un régimen sancionador a las empresas y administraciones públicas que no cumplan los plazos de pago que establece la Ley de Morosidad, especialmente con los autónomos y pymes.
“La morosidad sigue siendo una de las grandes lacras a las que los autónomos y pymes tienen que hacer frente en su día a día y que sigue provocando el cierre de muchos negocios y actividades. En un momento como el que nos encontramos, con medidas que facilitan la puesta en marcha de nuevas actividades, que apuestan por los autónomos, hay que tener “Tolerancia 0” con la morosidad”, señala Lorenzo Amor, presidente de ATA.
MEDIDAS A ADOPTAR
Actualmente hay medio millón de autónomos que no llegan al salario mínimo (SMI). Para ellos, para los que tienen los ingresos más bajos, es necesario que se facilite la cotización diferenciada.
Desde ATA pedimos que para los autónomos que demuestren unos ingresos anuales entre el SMI y la base mínima (919,80 euros) se les debe aplicar una cotización reducida. Y, los que estén por debajo del SMI, deberían poder pagar una tarifa de 50 euros durante dos años prorrogables a otro más.
Del mismo modo, ATA considera necesario establecer reformas que permitan aumentar los ingresos en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), entre las que se encuentra la creación de un régimen especial para los autónomos societarios, de tal manera que tengan un régimen asimilado al Régimen General y las sociedades puedan deducir las cotizaciones de los autónomos societarios, lo que supondría unos ingresos superiores a los dos mil millones de euros.
CONSEJO ECONÓMICO Y SOCIAL – CES
2018 debe también terminar con el cumplimiento de la Ley de Reformas Urgentes de Trabajo Autónomo. La ley establece que en el plazo de un año desde su entrada en vigor, el pasado 26 de octubre, deben de realizarse las reformas necesarias dentro del Consejo Económico y Social (CES) para que las organizaciones de trabajadores autónomos tengan voz propia dentro de este organismo consultivo. Los autónomos tienen que estar representados por derecho propio en el CES.